14 julio 2015

Saborear texturas: Una travesía por los sentidos


Quiero hablar de los sentidos y, como tal vez a los lectores también se les conquiste por el estómago, comenzaré por el del gusto. Porque es que ahora, luego de años de comer muy cerca de casa, puedo decir que esa comida con la que crecemos termina adquiriendo una monotonía severa. Su presencia impone una cadencia rutinaria de la que no somos conscientes hasta que aparecen nuevos ritmos. El primero de ellos —uno vertiginoso e impredecible— fue, para mí, la comida santandereana; sus platos parecen estar en otra escala musical, una para la que mi gusto, quizás, se había estado preparando. Una que valía la pena escuchar. En el momento en que una extraña cebollita ocañera liberó su sabor en un temperamental pequeño trozo de carne oreada, se produjo una explosión en la que el aburrimiento había terminado. Era como si Paco de Lucía interpretara acordes para que mis papilas gustativas se sintieran invitadas a una eufórica e inesperada fiesta.


http://aprendeenlinea.udea.edu.co/revistas/index.php/revistaudea/article/view/23209/19066


Carlos Andrés Salazar Martínez

0 comentarios:

Publicar un comentario