10 enero 2010

Referentes



El origen de frases o de palabras es un tema atrayente y en esa búsqueda he encontrado información que despierta el deseo de ir un poco más allá. Este artículo será entonces el primero de lo que espero sean muchos, en los cuales demostrare que nuestra relación con la historia no está tan lejos como lo pensamos, que aun seguimos siendo víctimas de lo que alguien dijo o escribió en el pasado. Que somos alumnos bien adiestrados de Voltaire, de Herman Melville, de la edad media o la filosofía griega. De pronto son muchos los casos conocidos pero estos son los que quiero enunciar.

Comenzare contando como una obra se convierte en clásico. Este es sólo uno de los motivos debo aclarar. Los referentes físicos actúan en la obra como sistema nemotécnico. Permiten que un texto sea evocado al tenerse contacto con uno de esos referentes a los que hace mención y honor, es de esa manera que la obra no es olvidada con facilidad y se pueda recurrir a ella para poner ejemplos o hacer indicaciones. Es de esta forma que Joyce se hace un escritor clásico, pues aparte de su gran estilo, transforma a Dublín en el gran modelo de su obra. Es así como cada calle, el cruce de cada esquina, cada taberna, dejan de representarse solo a ellas, son ahora lugares que perpetuán a Joyce y su Ulises.

Existen también frases de gran agudeza y fácil recordación que permiten ser traídas a uso en la cotidianidad. "Medio mundo se hizo para comerse al otro medio" o "El trabajo dignifica" son expresiones que hemos escuchado pronunciar de algunos de nuestros padres, son frases prestadas de un señor conocido por nosotros como Voltaire y al que muchos desconocen como autor de ellas.

Palabras hay también que fueron usadas con significados muy diferentes a los que deben su existencia. Acicate es un punzón que utilizaban en la edad media para hacer que los caballos o bueyes se movieran; mientras misericordia era un cuchillo largo o espada corta para llevar al cinto, que se utilizaba para rematar a los heridos después de la batalla o para el cuerpo a cuerpo, usada por tropas auxiliares, arqueros por ejemplo.

Nada nuevo es decir que Hollywood ha popularizado frases que no le pertenecen, ha hecho de ellas referentes, la gente inconscientemente engancha las frases en su psique y genera una realimentación que perpetúa la idea. En Moby-Dick Melville asevera que "la ignorancia engendra la duda" y luego Yoda en Star Wars recalca que "la duda engendra el miedo".

Son frases que atraviesan la sociedad y la llenan de esperanza pero nunca de manera consciente, hacen parte de un histórico inconsciente colectivo - referente presente no físico - que evoluciona con el concepto cambiante que del mundo ha hecho, con su existencia, la humanidad.

Esta última forma, el perpetuar ideas, correría el riesgo de decir, es más fuerte que el perpetuar obras ancladas a la realidad.

Carlos Andrés Salazar Martínez

Imagen: Temple Bar, Dublín.